domingo, 14 de febrero de 2016

Alma libre.

  Entré sin pedir permiso y tus ojos me dijeron que no era bienvenido. Más que palabras si lo hubieses expresado con tu boca; pero tus ojos no mienten cuando miras a los míos. Me hablas de amor pero no me miras. Intenté cambiar pero la razón eras tú, y ahí, tenía las de perder.
   Ahora comprendo tus silencios, no soy una persona perfecta y ahora entiendo tus razones, aunque para mostrarlas me hayas herido. Sigo sintiendo algo tan simple como es el amor, escuchas mis súplicas pero sigues cantando para ti. Es algo tan bonito que solo nosotros lo conocemos, pero tú aún no lo sabes, algún día... algún día seré tuyo, pero tú no lo sabrás porque eres alma libre, sin ataduras.     En tu manual de vida no existe la palabra cambio, todos cambian menos tú; eso es lo que me gusta de ti y lo que me mata.

6 comentarios:

  1. En esa libertad está el precio...
    Un abrazo.

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  2. El amor es un ave maravillosa Paco, no suele vivir en cautiverio, pero suele ser su trino hermoso cuando se posa en las manos amadas consciente de su cariño.

    Profunda tu prosa

    Abrazos y linda semana

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    1. Ese amor es el que cuesta conservar, el que lleva trabajo diario, por eso es tan querido y a la vez temido. Un fuerte abrazo, gracias y linda semana para ti también.

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  3. Hay silencios que matan como desaires, como desprecios, tocayo.

    Un abrazo.

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