Esta mañana, en la playa, he mirado al horizonte, allende el mar
se junta con el celeste. No sé lo que buscaba, ni siquiera sé lo
que hacía, en este estado he respirado hondo, tanto como
he podido, por un momento he sentido . . . algo. Me ha hecho
parecer tan pequeño que mañana volveré para intentar sentir
lo mismo, hacerme pequeño me ha hecho ver lo equivocado
que estoy respecto a ser el ombligo del mundo, me he quitado
un peso de encima, desde ahora sólo seré yo y dejaré que el
mundo gire sobre sí mismo.
Cada uno de nosotros somos el ombligo del mundo de nosotros mismos y porque no? de alguien más...
ResponderEliminarCariños...
Es que somos como un grano de arena en la inmensidad del universo.
ResponderEliminarUn abrazo.
Somos como Hormigas ante la inmensidad del Universo.
ResponderEliminarAbrazos...A veces es bueno repetir esas sensaciones que nos permiten esas Reflexiones.
Abrazos.
Al empequeñecernos ante un bello paisaje,nos damos cuenta de que formamos parte de un todo tan especial,que acabamos por sentirnos importantes dentro de ese todo.
ResponderEliminarY eso es porque lo somos!
Besos.
Esta reflexión es precisa paco.
ResponderEliminarBesos.
Tocar fondo es una gran lección de humildad, y sólo el humilde puede hacer que sea el mundo el que gire a su alrededor y acabar siendo grande. ¡Felicidades!
ResponderEliminarUn abrazo.
Cuando volvías de la playa ¿no has visto un grano de arena minúsculo junto al paseo marítimo? Era mi ombligo, es que ya llevo muchos días paseando por allí...
ResponderEliminarAbrazos, siempre