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Con el silencio haciendo la callada,
en el recuerdo sigo estando solo.
El hastío hizo mella en el camino
dominando el denuedo:
me distancio de ti,
me alejo de lo que eres,
me marcho sin echar la vista atrás.
Y atrás se queda todo
perdido en la retina de mis ojos
perdido en el carmín de mi linaje
perdido en el asiento de mi esencia
La carretera y su sinuosidad me atrapan
y hago del pavimento salvación:
Dedo pulgar que ofrece la ventura
palpando el sentimiento mutuo, artero.
La dicha venidera se ofrece vital,
a poco, exuberancia capital.
El ahogo y sonrojo se diluyen
disculpando las sombras
al mostrar nacimiento, luz.
La casualidad será el acicate,
lo que marque mi dicha,
y mi fatalidad será el azar.
Digo así adiós a lo hecho por derecho:
Bienvenida seas . . . vida.
Digo como tú, Paco, "Bienvenida seas, ¡vida!"
ResponderEliminarUn abrazo.
Es bueno dejar lo malo atrás y comenzar dándole nuevamente la bienvenida a la vida.
ResponderEliminarMuy bueno, Paco!!
Cariños…
Caer...y volverse a levantar con la mirada puesta en la esperanza. Paco, me has llegado al alma con esta bellísima declaración de intenciones.
ResponderEliminarBueno, ya has visto que ando "muy" desaparecida por la blogosfera, pero no quería dejar pasar un día más sin desearte unas felices fiestas. ¡Un abrazo muy fuerte de esta medio murcianica que (aunque lo parezca) no se olvida de ti!
La dicha, querido amigo y tocayo, es el presente sin más alardes, lo otro es un soñar que lleva a la esperanza, si acaso uno es capaz de eludir la desilusión.
ResponderEliminar¡Feliz Navidad!
No creo en las casualidades, vivir es trabajar continuamente equivocándose y levantándose continuamente.
ResponderEliminarUn abrazo y Felices Navidades.
Me gusta; me encanta leerte y verte feliz en la línea de salida dispuesto para despegar y entrar en un nuevo año que espero sea maravilloso para ti y tu familia y en el que vais a celebrar importantes y felices acontecimientos.
ResponderEliminar¡Qué sigas en esta línea de inspiración, optimismo y creación! Seguiré tus andanzas a través del blog y también las de Víctor, Jana, Jhericó, y todas tus poesías y artículos que ya forman parte de mi vida.
A ver si en el 2014 podemos darnos algún paseo por los molinos...
¡Besos a Pepa, a tus hijos y un fuerte abrazo, querido amigo!
Renovarse o morir, dicen. De vez en cuando hay que renovarse sin mirar atrás y abrazar la vida real aunque sea duro, para no quedarse estancado.
ResponderEliminarTe deseo unas muy felices fiestas navideñas , Paco.
Un abrazo.
A pesar de todo hay que seguir viviendo e ilusionarse para sentirse vivo.
ResponderEliminarFeliz Navidad Paco, de todo corazón y mis mejores deseos para tí.
Muchos besos.
Magnífico, como siempre. Pleno de vitalidad y avance hacia un azar que siempre nos espera y nos sorprende. Bienvenida sea otra andadura por este Camino lleno de Fantasía y retos que surgirán en cada rincón de nuestra Existencia.
ResponderEliminarComo decía un escritor holandés:
"Sólo la renovación puede mantener, el que se queda parado, se retrasa".
Abrazos, mi Gran Amigo.