Sentarse a esperar
de los alberos el viento,
dejar que corra helando
tu gélido cuerpo,
no mover, ni causar baja
por la necedad del miedo,
dejar que el zaino, hecho cuerpo,
te lleve camino en medio,
para dejarte medio muerto.
Ofrecer la ofensa sin agravio
de lo vivido, estar resentido
con lo propio, que de lo adquirido
ya la capota se hizo hilo
y, no tapa ni de media
a tres cuartos. las candelas
que ni encendidas dan luz
a estos ojos que ya no brillan.
Mis razones me asisten
para querer caer en la zozobra
de saber si recoger mis huesos
es hacer de la comparsa un bien
o dejarlos en el albero al sol
y que sirvan de alimento,
que muchos son los buitres
y pocas ovejas van quedando,
que al cambiar el norte,
mi estrella ya no me guía
por antiguos horizontes
y ya he deslucido si llenar
de monedas los pantalones
es dictado del corazón,
o llenarse de amores
es cambiar los patrones,
que conciencia y sueño
iban de la mano cogidas,
aunque mucho ajustaran los calzones
Paco, tus letras siempre llevan encerradas una enseñanza enorme, ahora tocas los tiempos que corren y su investidura de frío metal, pero las monedas en los bolsillos se van gastando, quizás hasta por un pequeño hueco se vayan cayendo a nuestro paso, sin embargo, los sueños, las emociones, los sentimientos, esos van con nosotros toda la vida, porque se atesoran muy dentro allí donde la ciega mirada no alcanza.
ResponderEliminarUna belleza, como siempre.
P.D: Ya es crónica Paco, te aseguro que no tiene remedio...
Amigo Paco: he estado leyendo tus entradas de los últimos días y veo que estás en un gran momento de inspiración y creación artística. En estos tiempos que corren da gusto entrar a rincones como este tan llenos de sensibilidad y talento. Un fuerte abrazo. Seguimos en contacto...
ResponderEliminarCada vez van quedando menos ovejas y proliferan sin parar los buitres. Tenemos que alimentar nuestra Alma de Sueños e inspiraciones como la que tu has tenido hoy.
ResponderEliminarComo siempre...¡¡¡Genial!!!
Abrazos.
tiempos revueltos... ganancia de los vivos y frescos
ResponderEliminar;)
siempre ha sido así, desde que el hombre decidió vivir en comunidades, no hay de otra
hay que seguir en lo que se estaba o cambiar en 180° de una, no sé y no creo que las personas estén dispuestas a dejar sus comodidades y conquistas por el incierto
buen texto con reflexivos pensamientos
abrazos Paco y feliz jornada
Hay que tener esperanza y fe. Esos buitres se quedaran sin alas y sin pico, ya lo verás, y serán vencedoras las ovejas, que ya no serán mansas ni se dejarán aborregar.
ResponderEliminarBesotes Paco!
Paso a dejarte un beso querido Paco y a felicitarte por este texto.
ResponderEliminarGracias por tu presencia. Te dejo un beso enorme.
Vaya, estos días la comunidad bloquera está algo derrotada... ¿Será la lluvia?
ResponderEliminarUn abrazo.
Anda el río revuelto,éste de la vida que a la postre unifica y a todos nos lleva hacia el mismo final,buitres incluidos...
ResponderEliminarBesos.
Tiempo de buitres, paisano Paco. Digo yo que todo pasará tarde o temprano.
ResponderEliminarUn abrazo de Mos desde la orilla de las palabras.